Qué complicado puede resultar realizar un proceso de desvinculación laboral que pueda ser lo más beneficioso posible tanto para el empleado y la empresa.
Sin duda, sobre todo para el empleado, este puede resultar un proceso difícil y complicado de realizar si no se tiene en cuenta que estamos tratando con personas.
En este artículo, exploraremos a fondo qué es la desvinculación laboral y cómo afecta a cada una de las partes. Analizaremos los diferentes tipos de desvinculación laboral, desde renuncias voluntarias hasta despidos y finalización de contratos.
Además, nos sumergiremos en el proceso de salida del empleado, detallando los pasos comunes que suelen seguir las empresas al enfrentarse a esta situación delicada.
Tabla de contenidos:
- ¿Qué es una desvinculación laboral?
- ¿Cuáles son los tipos de desvinculación laboral?
- ¿Cómo es el proceso de Desvinculación de un empleado?
- Ejemplos de desvinculaciones laborales.
1. ¿Qué es una desvinculación laboral?
La desvinculación laboral es el término que describe el proceso mediante el cual un empleado se separa de su empleo actual en una empresa o entidad. Esta separación puede ser el resultado de diversos factores y puede ocurrir por voluntad propia del empleado o por decisión del empleador. Un poco más adelante veremos los tipos que existen.
A veces, este proceso puede resultar desafiante y especialmente sensible tanto para el empleado como para la empresa. Para el empleado, puede implicar la necesidad de encontrar un nuevo empleo, ajustarse a un cambio en la situación financiera y emocional, y enfrentar la incertidumbre sobre el futuro.
Para la empresa, puede requerir la reasignación de tareas, la búsqueda de un reemplazo (con lo que conlleva esto en términos de tiempo y gasto), o la implementación de cambios en el organigrama corporativo.
En todo caso, la desvinculación laboral se realiza siguiendo procedimientos y normativas establecidas por la empresa y las leyes laborales vigentes en la región o país. Estos procedimientos pueden incluir notificaciones previas, acuerdos de terminación, indemnizaciones y otros aspectos legales y administrativos.
2. ¿Cuáles son los tipos de desvinculación laboral?
¿Quieres conocer los diferentes tipos de desvinculaciones laborales que pueden ocurrir en tu empresa? Todas varían dependiendo de cómo se produzca esta separación entre el empleado y la empresa. Algunos de los tipos más comunes incluyen:
1. Renuncia voluntaria: Ocurre cuando un empleado decide dejar su puesto de trabajo por elección propia. Las razones pueden ser diversas, como oportunidades laborales más atractivas, motivos personales, cambios en la vida familiar o la búsqueda de nuevas experiencias profesionales.
2. Despido o terminación por parte del empleador: Se produce cuando la empresa toma la decisión de finalizar la relación laboral con un empleado.
Esto puede deberse a motivos como bajo rendimiento, violación de políticas de la empresa, reestructuraciones organizacionales, reducciones de personal debido a recortes presupuestarios o cambios en las necesidades comerciales, por ejemplo.
3. Finalización de contrato: Cuando el empleo está sujeto a un contrato por un período específico o para un proyecto en particular, la desvinculación laboral se produce al finalizar el término del contrato. Puede parecer similar en algunos casos, pero esto no implica necesariamente una renuncia o un despido, sino más bien el cumplimiento del tiempo acordado en el contrato.
4. Jubilación: En este caso, la desvinculación laboral se produce cuando un empleado decide retirarse del trabajo debido a alcanzar la edad de jubilación establecida por la empresa o por la ley.
3. ¿Cómo es el proceso de desvinculación de un empleado?
El proceso de desvinculación de un empleado varía según las políticas de la empresa, las leyes laborales vigentes y las circunstancias individuales que rodean la separación. Sin embargo, siempre debe hacerse con respeto y profesionalidad. Además, existen unos pasos que puedes seguir para realizar este proceso de forma efectiva y beneficiosa tanto para el empleado como el empleador.
1. Notificación y comunicación: El empleador informa al empleado sobre la decisión de poner fin a la relación laboral. Esto puede implicar una reunión privada en la que se discuten los motivos de la salida y se proporciona la notificación formal por escrito.
2. Documentación y trámites legales: Se completan los documentos relacionados con la terminación del empleo, como acuerdos de finalización, cartas de despido, indemnizaciones, certificados de trabajo y cualquier otro documento legal requerido por las leyes laborales locales.
3. Reunión de salida (opcional pero muy recomendable): En algunos casos, se realiza una reunión de salida para permitir que el empleado exprese sus preocupaciones, obtenga retroalimentación sobre su desempeño y se establezcan acuerdos finales, como el pago de salarios pendientes, beneficios o acuerdos de no divulgación.
4. Entrega de pertenencias y acceso: El empleado devuelve cualquier propiedad de la empresa que posea, como identificaciones, equipos, documentos, claves de acceso o cualquier otro activo relacionado con el trabajo.
5. Comunicación y transición de responsabilidades: Se planifica una transición suave para transferir responsabilidades y conocimientos a otros miembros del equipo o para designar un reemplazo, garantizando la continuidad de las operaciones comerciales. Esto puede hacerse con la ayuda del empleado o sin ella.
6. Proceso de salida: Se llevan a cabo procedimientos de salida, como la cancelación de beneficios, el cierre de cuentas de acceso a sistemas internos, la coordinación con el departamento de recursos humanos para asuntos relacionados con prestaciones y la finalización de cualquier otro trámite administrativo.
4. Ejemplos de desvinculaciones laborales.
A lo largo de los años, muchas empresas han tenido que enfrentar situaciones de reestructuración, cambios en la industria o dificultades financieras que han llevado a procesos de desvinculación laboral.
Algunas de ellas se han enfrentado públicamente a desafíos de reestructuración y despidos, y no siempre lo han manejado de la mejor manera, sin embargo, algunas de las siguientes lo intentaron.
1.Airbnb: En 2020, debido al impacto de la pandemia de COVID-19 en la industria de viajes y hospitalidad, Airbnb tuvo que realizar despidos masivos que afectaron a aproximadamente el 25% de su fuerza laboral. La empresa ofreció paquetes de indemnización y asistencia para la transición laboral a los empleados afectados.
2.Uber: En diferentes momentos a lo largo de los años, Uber ha enfrentado reestructuraciones y despidos en respuesta a desafíos financieros y cambios en el mercado. En 2020, la empresa despidió a aproximadamente 3,700 empleados en múltiples divisiones como parte de sus esfuerzos por reducir costos.
3.Microsoft: En 2014, tras la adquisición de Nokia y como parte de una reestructuración, Microsoft anunció el despido de alrededor de 18,000 empleados, una de las mayores reducciones de personal en la historia de la empresa. La compañía ofreció apoyo y programas de transición laboral a los empleados afectados.
